jueves, abril 19

Elecciones en Francia
Alejandro Teitelbaum
Argenpress

Las próximas elecciones presidenciales en Francia (primer turno el 22 de abril, segunda vuelta el 6 de mayo) además del interés que tienen en sí mismas pueden constituir un interesante estudio de caso acerca de los mecanismos que emplean las clases dominantes para preservar su poder y también sobre cómo los que se dicen representantes de las clases subalternas o dominadas se arreglan para que se pierdan las ocasiones de comenzar la construcción de un polo alternativo portador de un proyecto radical de transformación social.

I. Desde hace más de 20 años, y particularmente en los últimos diez, la situación económico-social de las clases populares en Francia no cesa de degradarse: caída del poder adquisitivo, erosión de la seguridad social, de los sistemas de educación y de salud, déficit habitacional cuantitativo y cualitativo creciente, altas tasas de desocupación, con picos en ciertas regiones y en los suburbios populares de las grandes ciudades y explosiones de violencia urbana y suburbana de los sectores juveniles marginados socialmente. Esta tendencia regresiva se ha mantenido invariable con los sucesivos gobiernos de derecha y del Partido Socialista, aunque se puede poner en el activo de este último ciertas medidas paliativas sociales de escasa envergadura y en su pasivo una aceleración de la privatización de las empresas públicas durante el gobierno PS de Lionel Jospin.

La jornada semanal de 35 horas, medida trascendente del Gobierno PS, se volvió como un boomerang contra los trabajadores pues fue aprovechada por los patrones para congelar y hasta disminuir los salarios (con el chantaje de la deslocalización de la empresa) , aumentar la intensidad y el ritmo del trabajo y, mediante la anualización del cálculo de la jornada laboral y la flexibilización de ésta, imponer semanas con horarios muchos más prolongados compensados con otros períodos de jornadas breves y así evitar el pago de horas extras.

La creciente presión y el consiguiente “stress” que sufren en las empresas los trabajadores de todas las categorías, se traduce en una serie negra de suicidios, como ha ocurrido recientemente en Renault y en una central nuclear.

Este panorama de regresión social se completa con una fuerte redistribución negativa de los ingresos caracterizada por la acumulación de fortunas siderales en pocas manos y remuneraciones astronómicas para los principales dirigentes de las grandes empresas.

Durante los últimos cinco años, con el gobierno de derecha de la UMP, se aceleró el proceso de empeoramiento de las condiciones de vida de los sectores populares, el que además estuvo acompañado por un discurso y una práctica represivas, especialmente contra los sectores más marginados y contra la inmigración, en particular contra la inmigración clandestina.

El protagonista principal de esta política fue Nicolás Sarkozy, quien fue ministro del Interior y también, durante un lapso, ministro de finanzas del segundo quinquenio de Chirac, que ahora llega a su término.

La respuesta popular consistió en explosiones de violencia urbana y suburbana y en grandes movilizaciones populares contra determinadas medidas del Gobierno, como el contrato de primer empleo (CPE) una forma de precarizar aún más la situación laboral de los jóvenes.

Los partidos opositores se solidarizaron con esas movilizaciones pero durante todo este período fue visible que el Partido Socialista, principal partido de la oposición, se limitó a criticar las medidas gubernamentales y casi no hizo propuestas concretas alternativas y menos todavía una propuesta político-económica general alternativa a la política gubernamental.

II. Hace varios años que Sarkozy se fijó el objetivo de la Presidencia de la República y para alcanzarlo comenzó por imponerse a sus adversarios dentro del partido gobernante, incluido Chirac y tomó el control del aparato partidario. Ahora es el candidato sin oposición interna en el UMP actualmente gobernante, después de haber vencido las reservas y resistencias que encontró en las propias filas partidarias su política francamente represiva, a favor del gran capital y pronorteamericana y su ideología reaccionaria con tintes racistas. Si es elegido cabe esperar de él una verdadera “blitzkrieg” contra los derechos de los trabajadores, contra los inmigrantes y las clases populares general.

II. Hubiera cabido esperar una reacción de la oposición proporcional a tal amenaza, que puede muy bien concretarse con la victoria de Sarkozy en el segundo turno, que es la hipótesis más probable a esta altura del proceso electoral.

Sobre todo que el Partido Socialista, como principal partido opositor, convocara a toda la izquierda para establecer en conjunto acuerdos programáticos y de candidaturas.

Eso no ocurrió y en cambio el PS elaboró un programa que no contiene respuestas apropiadas a los graves problemas que inquietan al pueblo francés, sino que refleja un “consenso” heterogéneo entre posiciones diferentes de los líderes de las distintas corrientes internas, algunas más o menos izquierdistas y otras centristas o social liberales.

Después el PS terminó de despejar el camino de Sarkozy a la Presidencia eligiendo a Ségoléne Royal como candidata.

Esta decisión, que algunos califican de catastrófica y otros de “enorme estupidez”, fue el resultado de varios factores concurrentes.

Uno de ellos es que actualmente es “tendencia” promover a mujeres a altas funciones del Estado: Merkel en Alemania, Bachelet en Chile, etc. El sistema dominante aprovecha hábilmente esa “moda” para conservar la adhesión de los ciudadanos, cansados de las elites dirigentes formada fundamentalmente por hombres. La oferta consiste, no en cambiar de política, sino en hacer un “enroque” entre mujeres y hombres en el elenco dirigente.

Todo lo cual no tiene nada que ver con la justa reivindicación de terminar con el papel secundario de las mujeres en política.

Esta táctica resultó eficaz en el PS, pues los militantes estaban hartos de que todo se resolviera mediante arreglos entre los principales líderes de las diferentes corrientes, todos hombres, los llamados “elefantes” del Partido.

Otro factor que desempeñó un papel muy importante a favor de la candidatura de Ségoléne Royal fueron las encuestas de opinión, que la daban ganadora frente a Sarkozy.

Los institutos de sondeo determinan en buena medida las decisiones políticas de los electores. Para ello presentan los resultados de las encuestas como si fueran el reflejo exacto del estado de la opinión, cuando en realidad esos resultados son solo aproximados y más o menos manipulados. Los institutos, aparentemente neutrales, lo son sólo en parte: uno de ellos, el IFOP, está dirigido por Laurence Parisot, quien posee el 75% de las acciones y es a su vez presidenta de la asociación patronal francesa, el MEDEF.

Esos institutos funcionan en sinergia con los grandes medios de comunicación, casi todos controlados por el gran capital industrial y financiero, para orientar y manipular a la opinión pública.

El tercer factor que condujo a la candidatura de Ségoléne Royal fue una especie de golpe de Estado interno en el PS que consistió en un reclutamiento masivo de afiliados (unos 60.000 nuevos miembros en pocos meses que se agregaron a los 140.000 viejos miembros) quienes pagaron una cuota de ingreso muy baja y ni siquiera necesitaron concurrir a un comité para afiliarse al PS pues pudieron hacerlo por internet.

En esas condiciones se produjo la votación interna en el PS con tres candidatos: S. Royal, como figura que reunía tres ventajas: ser mujer, no formar parte de los “elefantes” y presuntamente capaz de renovar los hábitos internos del Partido y de cerrarle el paso a Sarkozy; Strauss Kahn, de tendencia social liberal y Fabius, representando el ala izquierda, aunque muy marcado por su anterior actuación social liberal como ministro de finanzas y Primer Ministro.

Con una gran participación de los afiliados, S. Royal resultó elegida por algo más del 50 por ciento de los votos, mientras Strauss Kahn quedó en segundo término con algo más del 20% y Fabius tercero con alrededor del 20% de los votos.

Consagrada candidata, Ségoléne Royal comenzó a actuar independientemente del Partido y de su programa revelando una ideología francamente retrógrada, por ejemplo su propuesta de encuadrar militarmente a los jóvenes “revoltosos” de los suburbios, de rescatar el “valor trabajo” que se traduce en trabajar más para ganar algunos centavos más, etc. Su discurso electoral es superficial e incoherente sobre un fondo claramente conservador e intenta decir en cada ocasión lo que piensa que el auditorio quiere oír, poniendo el acento en lo social cuando se le informa que está perdiendo intención de votos por su izquierda. Además acumuló las “gaffes”, con lo que se ha ganado cierta reputación de incompetente. Cuando declaró que a Irán tampoco se le debe permitir desarrollar una industria nuclear civil, quedó la duda de si lo dijo por desconocimiento del Tratado Internacional de no Proliferación o por afán de ser más bushista que Bush en la materia. En todo caso, en política internacional su “atlantismo” es indiscutible.
Arlette Laguiller sintetizó bastante bien la campaña electoral de Royal, cuando dijo que “trata más de parecerse a Sarkozy que de diferenciarse” y que forma parte también de los candidatos del campo patronal.

Con la candidatura de Ségoléne Royal culminó el giro neoliberal del PS, quedando descolocados en su seno una minoría de afiliados y algunos dirigentes.

La actuación de S. Royal como candidata, además de desesperar a no pocos dirigentes y afiliados del PS de todas las tendencias, se reflejó en las encuestas de opinión que han dado hasta ahora invariablemente ganador a Sarkozy en los dos turnos electorales y con una diferencia que oscila entre los cuatro y los ocho puntos (52 a 48 hasta 54 a 46) en la segunda vuelta. Para una política antipopular y de derecha, los electores prefieren el original a una mala copia.

III. La izquierda (el Partido Comunista, la Liga Comunista Revolucionaria, varios grupos menores, personas independientes, sindicalistas, algunos afiliados socialistas, entre ellos el dirigente y senador Melenchon ), alentada por el triunfo del No en el referéndum sobre la Constitución europea (55 % ciento por el No contra 45% por el Si, este último propiciado por el PS y la derecha tradicional gobernante) comenzó a encarar la posibilidad de elaborar conjuntamente un programa de transformación social y de presentar una candidatura común para la elección presidencial. La ambición de constituir un polo alternativo de transformación social tenía su base real en el hecho de que podía estimarse que del 55% del voto por el No a la Constitución europea, el 35% aproximadamente expresaba el rechazo desde posiciones de izquierda del neoliberalismo, más exactamente del capitalismo monopolista mundializado.

Con el objetivo de constituir el polo alternativo de izquierda se formaron en toda Francia entre 700 y 800 comités locales, que sumaron unas 15 a 20 mil personas.

Lucha Obrera , de Arlette Laguiller, se mantuvo al margen de ese proyecto colectivo.

El primer obstáculo para la constitución del polo de izquierda lo puso la LCR que proclamó la candidatura presidencial de su líder Olivier Besancenot, aunque éste manifestó su disposición a desistirse a favor de un candidato común. Pero además la LCR se negó a participar oficialmente en los Comités de izquierda, mientras el PC no se comprometiera formalmente a no realizar en el futuro acuerdo alguno de participación en un eventual gobierno del PS. No obstante, envió algunos “observadores” a las reuniones y varios militantes de la LCR participaron plenamente, en desacuerdo con la estrategia de su dirección.

El líder campesino y altermundialista José Bové, que participó en el comienzo de los trabajos, no tardó en retirarse argumentando que la mayoría de los Comités estaban manipulados por el PC y tampoco intervino en la elaboración del programa, que fue el fruto de un tranajo colectivo con bastante participación y de concesiones mutuas y que, en principio, conformó a todos.

El programa fue el fruto de un trabajo colectivo con bastante participación y algunas concesiones mutuas y que, en principio, conformó a todos.

Para la elección del candidato se estableció un procedimiento bastante complicado que se llamó de “doble consenso”, mediante el cual en los comités locales se votaron orden de preferencias por distintos precandidatos. Con los resultados de los comités se realizó una reunión nacional de delegados que constató que la más votada había sido Georges Buffet, la secretaria general del Partido Comunista, ocupando los lugares siguientes dos personas independientes, Yves Salesse y Clementine Autain. Los independientes y los grupos menores no aceptaron que Buffet fuera candidata, argumentando que su candidatura daría una tonalidad muy PC a la coalición izquierdista. Hubo algunas negociaciones para llegar a una transacción pero el PC mantuvo la candidatura de Buffet sosteniendo que había recibido el apoyo de la gran mayoría de los comités y finalmente se llegó a una impasse.

Algunos propusieron que para salir del impasse se convocara a una elección del candidato presidencial de izquierda abierta a todos los ciudadanos, como hizo en Italia el frente antiberlusconi, realizando primarias en las participaron más de 4 millones de votantes. Era una propuesta que, puesta en práctica, podía ayudar a integrar al polo alternativo a numerosos ciudadanos comunes con ideas de izquierda. Pero dicha propuesta no tuvo mayor eco.

Se pudo constatar entonces que el intento de presentar en las elecciones una candidatura común de izquierda había fracasado.

En esa situación hizo su reaparición José Bové que se proclamó candidato a la candidatura de la unidad de la izquierda apoyado por una campaña por vía electrónica que recogió, según sus organizadores, unas 30.000 adhesiones. Se celebró una nueva reunión de una minoría de unos 300 Comités para adoptar una decisión y bajo una fuerte presión de los partidarios de Bové que invocaban un supuesto entusiasmo popular por la candidatura del líder altermundialista (30.000 adhesiones por mail sobre más de 40 millones de votantes) , la mayoría de los presentes aprobaron la candidatura de Bové.

De modo que en las elecciones no hay un candidato de izquierda, sino cinco: Besancenot, de la Liga Comunista Revolucionaria, Buffet, del Partido Comunista, Arlette Laguiller, de Lucha Obrera , Bové y Schivardi, apoyado éste último por el Partido de los Trabajadores, un pequeño grupo trotskista. A Dominique Voynet, candidata de los ecologistas, con un poco de buena voluntad se la puede ubicar a la izquierda.

Faltando una semana del primer turno de las elecciones los cinco primeros totalizan, según las encuestas, entre 10,5 y 11.5 % de intenciones de voto y Voynet 1% (Besancenot entre 3,5% y 4%, Buffet entre 2,5 y 3%, Bové entre 1,5 y 2%, Laguiller entre 1,5 y 2% y Schivardi 0,5%).

El fracaso de la izquierda, además de presentar varias de las características de la impotencia de la izquierda tradicional en todo el mundo, tiene sus propias especificidades.

En primer lugar, si bien el PC, la LCR y otros grupos de izquierda desempeñaron un papel muy importante en el trabajo de esclarecimiento que llevó al triunfo del No en el referéndum constitucional, evaluaron de manera excesivamente optimista su verdadera influencia en el tercio del electorado que constituye el “pueblo de izquierda”. La realidad es que, según varios estudios, alrededor de dos tercios del pueblo francés no le tiene confianza a ningún partido político. Y del tercio del electorado de izquierda, la mayoría son independientes y solo una tercera parte, es decir entre el 10 y el 12 por ciento del total de electorado, tiene confianza en los partidos de izquierda.

El Partido Comunista francés está en vías de desaparición como fuerza política nacional. Sólo puede intentar sobrevivir como apéndice del PS, el que a cambio de su apoyo le concede algunas pocas circunscripciones de diputados en posición ganadora. El PC, que llegó a tener el apoyo del 27 % del electorado después de la Segunda Guerra Mundial, no llegó al 4 por ciento en las elecciones presidenciales de 2002 y alcanza el 6% en las elecciones de diputados al Parlamento Europeo, en las que se aplica el sistema proporcional. Conserva cierta fuerza en el ámbito municipal y las encuestas le atribuyen ahora Buffet en torno al 3% de los votos.

Pese a esa declinación, el PC tiene aún un fuerte aparato y entre 60 y 80 mil afiliados y en ese sentido conserva una gran ventaja frente a los demás grupos de izquierda. La Liga Comunista Revolucionaria, el partido de izquierda más numeroso después de PC, tiene sólo 3000 afiliados y una infraestructura mínima. El peso numérico y organizativo del PC gravitó en el funcionamiento de los Comités de izquierda que finalmente se pronunciaron mayoritariamente por la candidatura de Buffet, lo que provocó la crisis del intento de coalición y dio lugar a que algunos, como Bové, hablaran de manipulación por parte del PC. Lo cierto es que el PC no supo o no quiso tener la visión política de ayudar a crear un movimiento cualitativamente diferente, que trascendiera a una simple sumatoria de grupos y partidos y supiera integrar a los ciudadanos independientes con ideas de izquierda.

La LCR mostró también su falta de ductilidad política, al condicionar su participación a que el PC renunciara explícitamente a participar en un eventual futuro Gobierno del PS.

Este fracaso de la izquierda se produce sobre el fondo de una prolongada crisis y confusión teórica, ideológica y política en el pensamiento de izquierda, que por cierto no es exclusiva de Francia sino que tiene alcance mundial.

Como consecuencia de esa crisis del pensamiento de la izquierda, falta, en distintos grados, en los discursos de Buffet, Besancenot y Bové una propuesta estructurada y completa de las transformaciones económicas, políticas y sociales profundas que se revelan indispensables. Y también falta una propuesta para un giro total de la política internacional con el objetivo de que Francia establezca relaciones de solidaridad y de verdadera cooperación con todos los pueblos del mundo, en particular con aquéllos que luchan por su derecho a la autodeterminación y que no sólo se independice sino que oponga decididamente a la política agresiva y guerrerista encabezada por Estados Unidos.

Los “tres B” se muestran sensibles a las presiones ideológicas del sistema y a veces no se atreven a proponer las reformas drásticas que se imponen. Lo mismo ocurre en política internacional. Puede ser un ejemplo el hecho de que Besancenot critique a Chávez por sus relaciones amistosas con Irán, privilegiando las provocaciones verbales antiisraelitas del presidente Mahmud Ahmadineyad, aparentemente sin comprender el papel sobresaliente que desempeña Irán en el frente antiimperialista mundial y la necesidad de manifestarse solidario con dicho país ante las amenazas de una agresión estadounidense.

La única que parece insensible a las presiones ideológicas del sistema dominante es Arlette Laguiller que dice, por ejemplo, que hay que requisicionar a las empresas que se proponen deslocalizar para instalarse en países donde los salarios son muy bajos.

Las relaciones económicas y políticas internacionales, tema fundamental en las condiciones de la mundialización, ocupan muy poco espacio en la campaña electoral, tanto a la izquierda como a la derecha.

Por cierto que los partidos de izquierda tienen propuestas concretas sobre todo para los problemas económico sociales acuciantes pero casi no han tenido oportunidad de explicarlas y popularizarlas. Ello se debe a que hasta el 9 de abril los principales medios de comunicación estuvieron prácticamente monopolizados por los grandes candidatos, en particular Sarkozy y Royal en una campaña “no oficial” que duró varios meses y sólo a partir del 9 de abril, fecha de comienzo de la campaña oficial, de dos semanas de duración, el tiempo de presencia en los medios se distribuyó en partes iguales entre los 12 candidatos.

Todo indica que para la segunda vuelta quedarán Ségoléne Royal y Sarkozy o, aunque menos probable, este último y Bayrou. Los tres conservadores. Bayrou, hombre de derecha, ha ganado popularidad con su argumento central de que más de 20 años de alternancia en el Gobierno del Partido Socialista y de la derecha tradicional han llevado a Francia a una situación deplorable y que hay que salir de ella reuniendo en el Gobierno lo mejor de ambos bandos. En una palabra, propone una coalición de centro-derecha, propuesta que cuenta con el apoyo a dirigentes importantes del PS.

A una semana del primer turno de las elecciones, todas las encuestas atribuyen el primer lugar a Sarkozy (entre el 26 y el 29,5%), el segundo a Royal (entre el 23 y el 25%), el tercero a Bayrou (entre el 17,5% y el 21%) el cuarto a la extrema derecha de Le Pen (entre el 13,5% y el 15%) y entre el 1,5% y el 2% a otros dos candidatos de derecha: de Villiers y Nihous. Ya hemos indicado más arriba las intenciones de voto a favor de los candidatos de izquierda. En el segundo turno electoral Sarkozy le ganaría a Royal 53% a 47% y Bayrou a Sarkozy 53,5% a 46,5%. Algunos puntos más o menos, estos resultados se mantienen invariables en las encuestas desde hace varias semanas.

En esta situación ¿qué proponen los “tres B” de la izquierda a los electores?

Buffet dice que hay que crear las condiciones en el primer turno (votando por ella) para que la izquierda gane finalmente la elección. Es decir que para Buffet, contra toda evidencia , el PS y en particular Ségoléne Royal, forman parte de la izquierda. Esto agrega a la confusión y contribuye a demorar un proceso positivo en la política francesa.

Bové que habla de voto “insurreccional” (que consiste en votar por él en el primer turno) anunció que en la segunda vuelta votará a la candidata del PS, a la que califica de izquierda “blanda”. Ninguno de los dos dicen que harán si es Bayrou el que enfrenta a Sarkozy en la segunda vuelta.

Y Besancenot, que reclama que se lo vote en el primer turno para fortalecer la izquierda para las luchas futuras y por convicción, dice que la LCR decidirá su consigna de voto después del primer turno pero que su partido no practica la política de “lo peor”. Debe entenderse que propiciará el voto contra Sarkozy sin pronunciarse abiertamente por el voto a Royal.

La idea común de los tres es: en el primer turno voten por mí y en el segundo “cualquier cosa menos Sarkozy”, lo que tampoco aclara mucho políticamente la disyuntiva, sobre todo a largo plazo, que se le presenta a la clases populares.

Pero la realidad no es como la presentan los “tres B”. Porque Sarkozy será el ganador en el segundo turno si su adversaria es Royal. Esto ya prácticamente nadie lo duda, ni siquiera los dirigentes del PS. Incluso algunos de ellos hablan de un acuerdo con Bayrou, sin aclarar cuando ni cómo, aparentemente para tratar de salvar algo del desastre, pero en el fondo interesados en formar en Francia una nueva coalición de centro derecha, como propone Bayrou.

De modo que a los electores de izquierda les quedan dos opciones, un verdadero dilema de hierro. La primera es votar por convicción en la primera vuelta y votar en blanco o abstenerse en la segunda vuelta, ya sea para tratar de deslegitimar en lo posible el, al parecer, inevitable triunfo de Sarkozy sobre S. Royal, o para no participar en un duelo entre Sarkozy y Bayrou.

La segunda opción, si se quiere intentar con alguna probabilidad de éxito que se imponga la consigna “cualquier cosa salvo Sarkozy” es, tapándose la nariz, votar por Bayrou desde la primera vuelta.

Algunos analistas políticos hablan de una “derechización” del electorado francés.

A pocos días del primer turno casi un 40 % del electorado no sabe por quién va a votar. No hay tal derechización del electorado, sino una derechización del PS y la incapacidad de la izquierda para ofrecer una verdadera opción creíble antisistema, lo que ha desorientado a buena parte del electorado, que si no se abstiene o vota en blanco, tiene que votar por el que considera “menos peor”. En otros términos, elegir entre la sartén y el fuego.

Lo positivo de todo esto es que cabe esperar que después de las elecciones se produzca una recomposición del panorama político francés, con el PS fragmentado entre los centristas y los social liberales, por un lado y su izquierda, por el otro. Los primeros aliados al centro-derecha tradicional que puede encarnar Bayrou y la segunda formando parte de una verdadera alternativa popular de transformación social integrada sobre todo por los ciudadanos independientes de izquierda y por los miembros y ex miembros más lúcidos de los partidos de izquierda.

Sería uno de los autores intelectuales porque ha estado incitando a extremistas, asegura

Círigo responsabiliza al vocero de la arquidiócesis de ataques a legisladores

Más que llamar a la mesura, Gobernación debe frenar activismo político del clero, insta

GABRIELA ROMERO , RAUL LLANOS , CIRO PEREZ , BERTHA T. RAMIREZ

Militantes del PAN-DF durante la jornada de información contra la despenalización del aborto
Militantes del PAN-DF durante la jornada de información contra la despenalización del aborto Foto: Marco Peláez

A cinco días de que se presente ante el pleno el dictamen en materia de aborto, el presidente de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), Víctor Hugo Círigo, responsabilizó al vocero de la arquidiócesis de México, Hugo Valdemar, de lo que le ocurra a cualquier legislador. "Hay actores intelectuales, él es uno de ellos, porque ha estado, incitando, azuzando a grupos de fanáticos a agredir a los asambleístas".

Luego de recordar las amenazas de muerte que han recibido por apoyar la despenalización el aborto, el perredista remarcó: "este tipo de personajes van a terminar siendo los actores intelectuales de estas amenazas, por generar un clima de linchamiento en contra de los diputados".

Puntualizó que más que un llamado a la mesura, el secretario de Gobernación, Francisco Ramírez Acuña, debe frenar el activismo político de la jerarquía católica. "Todos sabemos que de acuerdo con el artículo 130 constitucional, la Iglesia está impedida para hacer activismo político, sin embargo, está organizando una solicitud para un referéndum mediante la página de Internet de la arquidiócesis".

Todo ello ante la pasividad de la Secretaría de Gobernación. "Espero que despierte y actúe, porque no es posible que a plena luz del día se presenten grupos como el Ejército Nacional Mexicano, que parecen sacados del fascismo de la Segunda Guerra Mundial".

Al respecto el presidente del PRD nacional, Leonel Cota, lamentó que los sectores gubernamentales, eclesiásticos y de grupos de derecha, se inclinen por condenar cualquier cambio legal que atienda un problema de salud pública y no busquen el castigo de quienes de manera clandestina se hacen de grandes recursos económicos a costa de la seguridad de las mujeres.

En tanto, la presidenta del PAN capitalino, Mariana Gómez del Campo, pidió a la jerarquía católica actuar con prudencia y no radicalizar su discurso en torno al aborto, esto a pesar de que apenas el lunes llamó "chillones" a los legisladores que denunciaron haber recibido llamadas intimidatorios, e incluso amenazas de muerte.

Su fracción en la Asamblea Legislativa anunció que en caso de que el martes el PRD apruebe la despenalización del aborto, solicitará al jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, vetarlo, y de ser necesario buscar el apoyo de legisladores de otros partidos para presentar un recurso de inconstitucionalidad.

Con relación al informe de gastos de la campaña contra el aborto que promueve la coalición Por los Derechos de Todos y Todas, el legislados perredista remarcó que es una burla que diga que ha costado tres millones 300 mil pesos. "Lo que sí puedo afirmar es que los promotores y financieros de esta campaña son los mismos que desarrollaron la campaña sucia contra el candidato del Frente Amplio Progresista a la Presidencia de la República, Andrés Manuel López Obrador".

Categórico detalló: "no es muy difícil colegir que son los mismos, la jerarquía católica, empresarios y los poderes fácticos que operan en el país para impedir que la izquierda arribe por la vía democrática, electoral, al poder".

Resguardan la Asamblea Legislativa

El secretario de Gobierno del DF, José Angel Avila, se comprometió ayer ante los diputados locales del PRD a brindarles todas las medidas de seguridad necesarias para evitar que pueda perpetrarse algún acto contra el recinto de Donceles y Allende por parte de opositores a la despenalización de una quinta causal de aborto.

En reunión privada, el presidente de la Comisión de Gobierno de la ALDF, Víctor Hugo Círigo, hizo la solicitud verbal y por la tarde formalizó la petición mediante un escrito de la Mesa Directiva, por lo que desde ayer y hasta el próximo 24 de abril, cuando se discuta en el pleno de la Asamblea, el dictamen de dichas reformas, el inmueble legislativo estará resguardado por elementos de la Secretaría de Seguridad Pública.

Rotundo fracaso del plan especial de seguridad estadunidense que cumple dos meses

Bagdad, sacudida por bombazos que provocan unos 200 muertos

Multitud enfurecida recibe a pedradas a las fuerzas de vigilancia y grita "¡abajo Maliki!"

El blanco, barrios chiítas

Es uno de los días más sangrientos en Irak en 4 años de ocupación

PATRICK COCKBURN THE INDEPENDENT

Traslado de una de las víctimas del estallido en un mercado de Sadriyah, uno de los cinco ataques con bomba perpetrados ayer en la capital de Irak
Traslado de una de las víctimas del estallido en un mercado de Sadriyah, uno de los cinco ataques con bomba perpetrados ayer en la capital de Irak Foto: Ap

Bagdad, 18 de abril. Este miércoles pasará a la historia como un día de infamia para los iraquíes, a quienes Estados Unidos les dice una y otra vez que la seguridad va mejorando. Casi 200 personas fueron asesinadas en uno de los días más sangrientos de los cuatro años de guerra, cuando coches bomba desgarraron cinco vecindarios de la ciudad, poniendo de manifiesto el fracaso del plan de seguridad estadunidense, que cumple ya dos meses.

Tras los estallidos, soldados estadunidenses e iraquíes que llegaron al lugar de las explosiones fueron recibidos a pedradas por una multitud furiosa que gritaba: "¿Dónde está el plan de seguridad? No estamos protegidos bajo ese plan".

Nubes de humo negro se elevaron sobre la capital iraquí luego de que cinco bombas estallaron en mercados atestados y calles dejando sólo cuerpos carbonizados y miembros amputados.

"Vi decenas de cadáveres", dijo un testigo en Sadriyah, un barrio mixto chiíta-kurdo en el oeste de Bagdad donde murieron 118 personas y otras 139 quedaron heridas. "Algunas personas se quemaron vivas dentro de los autobuses. Nadie podía llegar a ellos después de la explosión. Había trozos de carne por todo el lugar. Las mujeres gritaban los nombres de sus seres queridos que habían muerto".

La escalada en los devastadores ataques con bomba de insurgentes sunitas contra civilies chiítas ha desacreditado el plan de seguridad estadunidense que implementó un "incremento" de tropas estadunidenses. Lanzado el 14 de febrero, el plan tenía la intención de dar al gobierno iraquí mayor control sobre las calles de Bagdad.

El Ejército del Mehdi, la milicia chiíta acusada de tener escuadrones de la muerte operando contra civilies sunitas, ha adoptado un bajo perfil y evitado confrontaciones militares con Estados Unidos, pero esto seguramente dejará de ser así después de estos devastadores atentados con bomba. El primer ministro, Nuri Maliki, es percibido como incapaz de defender a su propio pueblo.

Tras las explosiones, un hombre abrió los brazos y vociferó: "¿Dónde está Maliki? Que venga a ver lo que está pasando". Las multitudes enfurecidas que apedrearon a uniformados estadunidenses e iraquíes también gritaron "¡abajo Maliki!"

El peor ataque ocurrió en el mercado de carne y verdura de Sadriyah, en el centro de Bagdad. El lugar ya había sido blanco de una de las peores atrocidades ocurridas en esta capital, cuando un atacante suicida estalló un camión el 3 de febrero pasado, matando a 137 personas. Muchos de los muertos el miércoles eran albañiles que reconstruían el mercado.

Uno de los sobrevivientes, Salih Mustafa, de 28 años, dijo que esperaba el autobús para ir a casa cuando la bomba estalló, a las 16:05. "Me apresuré a ayudar a las víctimas", dijo. "Vi tres cuerpos en una carreta de madera, los autos de los civiles estaban ayudando a trasladar a las víctimas. Fue una escena verdaderamente horrible".

No hay duda de que los bombazos tenían la intención de matar a tantos chiítas como fuera posible. Como media hora antes del estallido en Sadriyah, un atacante suicida se estrelló en su vehículo contra un puesto de control policial a la entrada del gran bastión chiíta de Ciudad Sadr, en el este de Bagdad, y que alberga a la fortaleza del clérigo chiíta, Moqtada Sadr.

La explosión mató a 33 personas e hirió a 45, según la policía. El humo negro salía de vehículos que ardían y la gente se movía por entre el metal retorcido para rescatar a los heridos. En otro barrio chiíta, Karada, un auto estacionado estalló matando a 11 personas e hiriendo a 13.

"El problema es que los chiítas ya no matan a tantos sunitas, pero los sunitas están matando a más chiítas que nunca", dijo un funcionario chiíta sobre los ataques del miércoles. "Si esto continúa, los chiítas van a querer venganza. Y entonces, las matanzas sectarias van a hacer palidecer todo lo que hemos visto hasta ahora".

Los ataques ocurrieron horas después de que Maliki dijo que las fuerzas de seguridad iraquíes tomarán control total del país para fin de año. Seis ministros que apoyan a Moqtada Sadr acaban de retirarse del gobierno en protesta porque Maliki no ha exigido a Estados Unidos determinar un calendario para el repliegue de sus tropas.

La comunidad chiíta, de 17 millones de personas, que conforma la mayoría de la población iraquí, es cada vez más hostil a la presencia estadunidense, mientras que los cinco millones de sunitas apoyan mayoritariamente la resistencia armada antiestadunidense. Los kurdos son los únicos que respaldan totalmente a Estados Unidos.

Gran Bretaña entregó hoy la los iraquíes la responsabilidad por la seguridad en la provincia de Maysan. "Luego se hará provincia por provincia, hasta que hayamos logrado la transferencia antes de fin de año", dijo Maliki en un discurso pronunciado en su nombre por el Asesor de Seguridad Nacional, Mowaffaq Rubaie.

Pero la transferencia del control político y de seguridad por parte de Estados Unidos y Gran Bretaña a las autoridades iraquíes siempre ha sido engañoso. Los iraquíes creen, no sin razón, que el control verdadero quedará en manos de las fuerzas de ocupación.

A principios de año, fuerzas británicas volaron un cuartel de policía en Basora, y soldados estadunidenses a bordo de un helicóptero trataron de secuestrar a dos funcionarios iraníes de alto nivel que visitaban al presidente iraquí, Jalal Talabani.

En gran medida, el poder real en Irak está aún en manos de Estados Unidos: el servicio de inteligencia iraquí es financiado por la CIA; el Ministerio de Defensa está fuertemente influenciado por Estados Unidos; la Zona Verde, donde el gobierno iraquí tiene sus cuarteles y viven muchos de sus miembros, está bajo autoridad de Estados Unidos.

En dicha zona, los estadunidenses pasan sin problemas los controles de seguridad mientras que los funcionarios iraquíes son sometidos a controles extremos. "Existe una cultura de dependencia hacia Estados Unidos entre funcionarios iraquíes", señaló un ex ministro iraquí.

El éxito del plan de seguridad estadunidense para Bagdad dependía menos de la incorporación de cinco brigadas estadunidenses adicionales, y más de hacer creer a los iraquíes que se les estaba brindando seguridad. Los insurgentes sunitas y las milicias chiítas se volvieron más fuertes en la capital iraquí durante 2006 porque sus comunidades tenían terror a los bombazos, los escuadrones de la muerte y los secuestradores. Los ejércitos estadunidense e iraquí y la policía sólo podían ganar aceptación si promovían un nivel mayor de seguridad. En esto están fracasando notablemente a pesar del incremento de muertes en las filas estadunidenses en las que, según el promedio de abril, mueren cuatro soldados al día.

Los funcionarios estadunidenses minimizan -o no se han enterado- lo mucho que se ha deteriorado la situación en Bagdad. "Hemos visto progresos inspiradores, pero también demasiada evidencia de que aún enfrentamos grandes desafíos", declaró el mayor general, William Caldwell, un vocero del ejército estadunidense en Bagdad ayer. "Siempre dijimos que asegurar Bagdad no sería fácil".

© The Independent

Traducción: Gabriela Fonseca

Mueren dos policías y un delincuente; los sicarios acudieron a liberar a uno de sus cómplices

Narcos convierten en campo de batalla un hospital de Tijuana

Ráfagas sacudieron la sala de urgencias

Enfermos y familiares debieron ser desalojados

ARTURO CANO , ANTONIO HERAS ENVIADO , CORRESPONSAL

Agentes de varias corporaciones, durante la balacera
Agentes de varias corporaciones, durante la balacera Foto: Notimex

Tijuana, BC, 18 de abril. Cuando sonaron los primeros cuatro balazos, Ana Lilia González Aguirre marcó el 066 en su celular. Antes de que le contestaran, las ráfagas sacudieron la sala de urgencias y ella, echada al suelo, gritó: ''¡Un 10-50, un 10/50!''

Con algunos empleados del hospital general, Ana Lilia, policía municipal retirada, comenzó a guiar a los 50 o 60 familiares de internos hacia una salida. Poco antes había dejado a su hermano, enfermo de pancreatitis, en el tercer piso del nosocomio y había bajado acompañada por un custodio y un cachorro que llevó a vender.

Todo comenzó alrededor de las 11 de la mañana -dos horas menos que la ciudad de México- en las inmediaciones de la central camionera, donde un grupo de sicarios se enfrentó a policías federales. Una ambulancia de la Cruz Roja recogió a un herido y lo llevó al hospital general. Pero en cosa de minutos sus cómplices arribaron al nosocomio.

Y sonaron los primeros tiros; todo fue carreras, gritos, terror, encima del dolor de los enfermos. Los familiares salían y los que pudieron sacaron a sus pacientes. El grupo de Ana Lilia se dirigió a una farmacia enfrente del hospital, el mismo donde falleció Luis Donaldo Colosio, el 23 de marzo de 1994, y desde ahí vieron pasar ''una camioneta Ford Lobo blanca, con el frente chocado''. Luego, otro grupo de gente echó a correr hacia la farmacia al grito de ''¡ahí viene, ahí viene!'', y una señora al lado de Ana Lilia dijo haber visto a un ''malandro'' (delincuente) asomar el cuerpo y luego arrepentirse y volver a entrar al hospital.

En muy poco tiempo el nosocomio fue rodeado por patrullas de todas las policías y cuatro vehículos del Ejército Mexicano. Un helicóptero comenzó a sobrevolar el edificio y el entubado río Tijuana, que queda enfrente.

Pero el desalojo de personal y pacientes, salvo en la balaceada zona de urgencias, no fue inmediato. Cuando se supo que los sicarios, en número indeterminado, seguían dentro, se ordenó el desalojo. De los pisos superiores salieron hasta una hora después de la primera y más cruenta balacera. Siguieron horas de confusión, de rumores, de angustia y desesperanza. Tres decenas de pacientes fueron llevados a un deportivo ubicado junto al nosocomio de 120 camas, y una docena a otros hospitales. Muchos de sus familiares, enterados por la radio o la televisión de los hechos violentos, iban de un lado a otro preguntando por ellos.

En los alrededores la cosa no se veía mejor. Acompañada por su madre, Marina Arvide, de 17 años, batallaba con sus muletas en busca de un taxi. Más allá, una joven pareja con un bebé en brazos no sabía a dónde ir. Y así por el estilo.

En un salón del pequeño centro deportivo, los médicos hacían lo que podían para despachar a los angustiados padres de los bebés enfermos. Uno escribió una receta sobre las rodillas, otro auscultaba, uno más simplemente apapachaba a una madre primeriza. Gabriela, con su bebé de 25 días de nacido en brazos, narra que a ella la sacaron como a la una de la tarde.

A unos pasos, el médico César Romano repetía la historia que luego sería oficial. A un grupo de sicarios le fue marcado el alto, se siguieron de largo y se enfrentaron a tiros con agentes de la Policía Federal Preventiva (PFP). Ahí murió un delincuente y otro, herido, fue llevado al nosocomio. Sus cómplices fueron a rescatarlo y no a rematarlo, como sugería la primera versión.

Con todo, hubo calma entre los desalojados, pero no en el hospital, donde alrededor de las 13:30 horas locales volvieron los balazos. Todo mundo, afuera, se tiró al suelo. Luego de cuatro horas y disparos al por mayor parecía increíble que ningún paciente ni empleado del nosocomio se contara entre las víctimas, sobre todo cuando se miraba el estado de la entrada de urgencias, cosa posible al filo de las tres de la tarde, luego de que policías federales sacaron a un delincuente y se lo llevaron en una patrulla. ¿Sólo un sicario mantuvo a raya a centenares de policías y soldados? Misterio tijuanense.

Lo cierto es que en el intento de rescate cayeron sin vida, a las puertas del área de urgencias, José Adrián López Torres, agente de la Policía Estatal Preventiva, y Rodolfo García Parrales, custodio del penal de La Mesa, quien vigilaba a un preso enfermo. Ahí también murió uno de los delincuentes.

El detenido sano fue identificado como Ernesto Sánchez Vega, El Chivo. El otro, el herido que no pudo ser rescatado, es Daniel Estrada, El Macaco, según el comandante de la policía municipal, Jaime Niebla.

Ambos formaban parte de un comando que viajaba en tres vehículos y fueron interceptados en la Vía Rápida Oriente, cerca de la Fiscalía contra el Robo de Vehículos de la procuraduría estatal y de la central camionera, según dijo en entrevista telefónica el procurador de Justicia del estado, Antonio Martínez Luna, quien confirmó el enfrentamiento entre elementos de la Operación Baja California y los delincuentes.

Fuentes policiacas identificaron a El Macaco como sicario del cártel de los Arellano Félix. El procurador señaló que estos hechos prueban que la Operación Baja California, puesta en marcha por el presidente Felipe Calderón en enero pasado, ha dado resultados: ''Se logró evitar algo mayor. Para eso está el operativo, (los agentes federales) reaccionaron ante un vehículo sospechoso, repelieron una agresión, impactaron a dos, uno lesionado y otro muerto, además de que en el hospital se aseguró a un tercero''.

Alberto Capella, presidente del Consejo Ciudadano de Seguridad Pública, quien a fines del año pasado encabezó una marcha contra la ''pasividad'' de las autoridades frente al crimen, dijo que ''este hecho prueba la decisión de combatir a quien sea''.

-¿Por qué los sicarios se arriesgaron al rescate?

-Eso habla de la seguridad que sentían antes del operativo.

En tanto se confirma si el ya prolongado operativo funciona de verdad, reporteros, personal del hospital y familiares de los enfermos caminaban por el lugar donde unas horas antes llovieron balas. Inclusive, algunos tomaban balas, casquillos y hasta trozos de cemento que volaron con los tiros.

Nadie tocó, sin embargo, las pertenencias abandonadas de los familiares de los enfermos: cobijas, chamarras, botellas de agua, recetas, papelitos con los teléfonos de los médicos, preciados objetos que quedaron ahí, en medio de los tiros.

Frente a la entrada del nosocomio hay un enorme anuncio espectacular: no se sabe si presume la foto del gobernador Eugenio Elorduy o que 232 mil familias del estado cuentan con el Seguro Popular. La inseguridad no ha alejado las inversiones, fue la más reciente declaración del mandatario sobre el tema.

La enorme cara del gobernador se salvó, porque la balacera fue en la parte de atrás, justo donde están los policías municipales, del ayuntamiento priísta echándose puyas con los estatales (los amenazaban en broma con soltar a un perro enjaulado). Adentro, las fuerzas federales y estatales; ellos en la puerta, lejecitos de los hechos.

Es la Tijuana de Jorge Hank Rhon, candidato a gobernador de Baja California, que se presume tan segura como la vecina San Diego. Los policías del alcalde con licencia portan un enorme brazalete. Dice, con letras enormes y doradas: ''México, zona segura''. El hospital de los balazos está apenas a dos kilómetros de la frontera con Estados Unidos.

''Me arrinconaron'', dijo el asesino de Virginia

Envió a televisora un paquete con texto, fotos y videos poco antes del segundo tiroteo

AFP , DPA

El estudiante sudcoreano Cho Seung Hui, quien asesinó a 32 personas el lunes en la Universidad Tecnológica de Virginia, envió, con diferentes poses, 43 fotografías y 27 archivos de video a la cadena estadunidense NBC
El estudiante sudcoreano Cho Seung Hui, quien asesinó a 32 personas el lunes en la Universidad Tecnológica de Virginia, envió, con diferentes poses, 43 fotografías y 27 archivos de video a la cadena estadunidense NBC Foto: Ap y Reuters

Blacksburg, 18 de abril. El sudcoreano de 23 años Cho Seung Hui, que asesinó a 32 personas el lunes en la Universidad Virginia Tech, para luego suicidarse, envió un paquete con cartas, fotografías y videos personales a la televisora estadunidense NBC, la misma mañana en que perpetró la matanza.

La colección de materiales provocó más dudas sobre el atacante, quien al parecer estaba convencido de que cometía un acto ineludible de heroico sacrificio en favor de personas cuyas identidades sólo quedan claras para él.

Además acusa a otros de haberlo ''arrinconado'' de manera tal que no le quedaba otra opción, y culpa a esos "otros" de tener las manos manchadas de sangre.

El paquete contenía un texto de mil 800 palabras, 43 fotografías y 27 archivos de video QuickTime, con imágenes de sí mismo. Este fue recibido hoy en las oficinas de NBC en Nueva York y llevaba sello de la oficina de correos de Virginia a las 9:01 hora local, es decir, una hora y 45 minutos después de que Cho mató a sus primeras víctimas y poco antes de que emprendiera su segundo tiroteo, que cobró la vida de 30 personas.

El canal señaló que el paquete hubiera sido recibido antes de no ser porque Cho lo envió a una dirección y con un código postal equivocados. La caja fue entregada a la Oficina Federal de Investigaciones (FBI), pero antes la NBC transmitió algo del material.

Brian Williams, presentador de NBC, describió el contenido del paquete como "un extenso manifiesto multimedia", con contenido "perturbador" y "larga diatriba".

"El texto es difícil de seguir, es divagante", declaró el presidente de NBC, Steve Capus, a quien fue dirigido el paquete. "En un momento hace una vaga referencia a la matanza y dice: 'Esto no tendría que haber sucedido'''.

Según Capus, Cho habla en los videos directamente a la cámara sobre su odio hacia los ricos. Menciona a "mártires como Eric y Dylan", en alusión a Eric Harris y Dylan Klebold, los dos adolescentes que asesinaron a 12 estudiantes y a un profesor en la escuela Columbine, en Littletown, Colorado, matanza que cumple su cuarto aniversario el próximo viernes.

Cho indicó que fue "arrinconado. Había 100 mil millones de opciones y maneras que hubieran evitado lo que pasó hoy", señala. "Pero ustedes decidieron derramar mi sangre. Ustedes me arrinconaron y me dejaron una sola opción.''

Las fotografías muestran a Cho en distintas locaciones, en algunas contra una pared blanca; otras sosteniendo un cuchillo y una en la que se ven balas alineadas sobre una mesa. También se le observa con los brazos extendidos hacia delante con una pistola en cada mano, y una más en la que está apuntándose en la sien con una pistola.

Inviable alianza con Convergencia: MGE

Inviable alianza con Convergencia: MGE

Pide Izquierda que AMLO respete los comicios en Veracruz

En reunión con el Manuel García Estrada, vocero del Frente Político de Izquierda, insistió en aclarar que alianzas con Convergencia son inviables, las rechazan por completo.

El incidente sucedió en Xico, Veracruz, comenta el vocero, "López Obrador dice frente a todos los militantes, que él quiere una coalición con Convergencia y toda la gente por primera vez abuchea a López Obrador, porque todos los perredistas de Veracruz no quieren una coalición con Cnvergencia". Lo que implicó para López distanciarse de millones de perredistas, porque va en contra del sentir de la mayoría de los compañeros perredistas.

"Al no hacerles caso, se provocó esta situación, que es lamentable, porque de una legitimidad tan grande que tiene Andrés Manuel, ahora llegar con perredistas y que sea abucheado eso cambia diametralmente las cosas, en cuanto a la legitimidad de él".

"Aunque no aprobamos el comentario de Andrés Manuel, no le quita el hecho de que la convención nacional lo eligió presidente legítimo de este país, el problema es que se quiera inmiscuir en el proceso electoral veracruzano"", y agrega que debe existir congruencia. El PRD no tienen ningún conflicto con lo que es la izquierda y su pensar respecto de que sí hubo fraude el dos de julio, sólo se le pide que los asuntos de Veracruz se los deje a los veracruzanos. "No estamos bronqueados con él, pero pedimos respeto", finalizó García Estrada.

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